La multinacional japonesa sigue revolucionando el mundo de las videoconsolas con Nintendo Switch. Su última propuesta resulta tan innovadora como interesante: la potencia de una consola de sobremesa que puede usarse de manera portátil. Mientras Sony y Microsoft siguen estirando el chicle de sus PlayStation y Xbox, Nintendo aporta originalidad una vez más. Y marca el camino a sus competidores: reinventarse o morir.
Una pantalla para dominarlos a todos
La consola es la pantalla. Tal como suena. Una suerte de tablet de 6.2″ con un chip Tegra X1 de Nvidia, similar al usado en el Shield Android TV de la empresa californiana. Su resolución es de 1280×780 y la excelente respuesta capacitiva le aporta una gran usabilidad.
La memoria interna es de 32GB, quizá un poco limitada para la descarga de juegos. Por suerte, aparte de sus cartuchos de juegos originales, cuenta con ranura microSD para ampliarla sin problemas.
Incorpora como sensores acelerómetro, giroscopio y sensor de brillo. Y monta una batería de 4310mAh con la que se asegura una autonomía de entre 3 y 6 horas, dependiendo de los requisitos del juego. En el apartado de comunicaciones encontramos una LAN inalámbrica con protocolo 802.11 a/b/g/n/ac, y Bluetooth 4.1 (aunque solo en modo TV). Altavoces estéreo y un conector USB tipo-C completan esta visión general.
Modo sobremesa
Si acoplamos la tablet en su base, transformamos la consola portátil en una de sobremesa. Un proceso tan obvio y rápido como encajarla en el conector, dejándola caer centrada en el dock. En este modo, la salida de vídeo (HDMI) de la Nintendo Switch es de 1920×1080 a 60 fps. El tamaño de la base es reducido, lo que facilita su ubicación junto a la TV o monitor. Es el momento de disfrutarla en una experiencia de juego perfecta. Y para eso han apostado con gran acierto por una nueva generación de mandos.
Joy-Con: otra vuelta de tuerca
¿Recordáis la experiencia de jugar con los Wii remote? Pues hacerlo con los Joy-Con supone una revolución 2.0. Nuevos sensores, varias formas de uso y vibración HD incorporada aportan una dimensión (des)conocida y original a los juegos. Los avanzados mandos de la Nintendo Switch se acoplan en la consola de manera sencilla, deslizándolos sobre unos rieles en los laterales. Colocarlos y soltarlos, tanto en la tablet como en su soporte, supone hacer click. Así de simple. Acoplados al soporte funcionan como un mando convencional, por separado lo hacen como dos individuales plenamente funcionales.
Experiencia Nintendo Switch
La leyenda «cuando quieras, donde quieras, como quieras» que acompaña a la Nintendo Switch se ajusta como un guante al resultado. Una consola portátil que se hace doméstica o viceversa. Puede que no sea la más potente del mercado. Ni la que cuente con los mejores gráficos del momento. Tampoco con el mayor catálogo de juegos… No importa. Nintendo no pretende librar esa batalla. Por el contrario, apuesta por versatilidad, originalidad y facilidad de uso (lo único complicado será elegir entre el modelo gris y el rojo y azul). Atributos que la convierten en la propuesta más innovadora y divertida creada hasta la fecha.
Si vuestras ganas de jugar son las mismas, pero os apetece hacerlo de forma diferente, enganchaos a la Nintendo Switch cuando, donde y como queráis!
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